Siete Dioses, siete días: La historia de la semana/séptima latina

¿Cómo surgieron los días de la semana? (Artigo original em português, clic aqui.)

Fue en el Imperio Romano que la astrología introdujo el uso popular de la septimana (“siete mañanas", en latín, semana en español), convención de origen babilónica. Inicialmente, los nombres de los dioses orientales fueron sustituidos por equivalentes latinos. Con el advento del cristianismo, el día del Sol, Solis dies, fue sustituido por dominica/dominicus, dia del Señor; y el saturni dies, dia de Saturno, por sabbatum, derivado del hebraico shabbath, o día de descanso consagrado por el Viejo Testamento. Los otros días eran dedicados a: la Luna; Marte; Mercurio; Júpiter y Venus. En Inglaterra, la semana de siete días llegó apenas en el siglo V, bien atrasada en relación al resto de Europa—y adaptada de acuerdo a los dioses anglosajones. Marte fue sustituido por Tiw, Dios de la guerra, dando origen a Tuesday; Mercurio por Woden, Dios de la poesía: Wednesday; Júpiter por Thor, Dios del trueno: Thursday; y Venus por Friga, Diosa del amor: Friday.

El término “feira” del portugués surgió porque, en la semana de Pascua, todos los días eran feriados—feiras o ferias—y los mercados funcionaban al aire libre. Con el tiempo, la iglesia católica prohibió los nombres paganos de los días de la semana, oficializando las ferias (feiras). El domingo, que sería la primera feria (primeira feira), conservó el mismo nombre por ser dedicado a Dios, haciendo que la cuenta inicie en la secunda-feria, segunda-feira en portugués (lunes en español), terça-feira (martes en español), quarta-feira (miércoles en español), quinta-feira (jueves en español). El sábado se mantuvo por respeto a la antigua tradición hebraica. A pesar de la oposición del Vaticano, las designaciones de origen pagana sobrevivieron en todo el mundo cristiano, menos en lo que se convertiría en Portugal, gracias al apostolado de San Martín de Braga (siglo VI), que combatía la costumbre de “dar nombres de demonios a los días que Dios creó”. En gallego, hermano del portugués, se conservan como en gallego-portugués o portugués antiguo: luns, martes, mércores, xoves, venres, sábado y domingo.

La “sexta-feira”, o viernes en español, era consagrada Venus, la Diosa del Amor (día "venéreo") en la mitología greco-romana. Ahora, ¡imagínatela en plena corte de Versalles! Es lo que parece sugerir la típica pintura neoclásica francesa llamada la Venus del Espejo (1751), de François Boucher. 

Traducción: César Maldonado 

Para la importancia del brillo del día, de Júpiter, así como saber sobre la historia de la palabra día (por qué es el día y no la día), puedes leer esta entrada.

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